Durante las primeras semanas de entrenamiento extenuante, el dolor de los músculos es un problema común que afecta las actividades diarias y dificulta el cumplimiento de su régimen de ejercicio regular.

Es recomendable comenzar lentamente entre 10 y 20 minutos de ejercicio en los primeros días y aumentar progresivamente para que el cuerpo tenga suficiente tiempo para adaptarse.

Consejos

Aplicación de calor o calor: directo o indirecto es un remedio eficaz para aliviar los músculos doloridos. El calor puede ser proporcionado en vapor, sauna o con una ducha con agua tibia. El calor revive los músculos adoloridos al mejorar la circulación sanguínea.

Estiramiento después del entrenamiento: una vez que haya terminado la sesión, el estiramiento reduce en gran medida la tensión en los músculos y ayuda a restaurar la circulación de la sangre.

Masaje: Masajear o frotar los músculos doloridos ayuda a aliviar los nudos sensibles que se producen como resultado del daño a las fibras musculares pequeñas.

Paquetes de hielo:  el uso de compresas frías o hielo reduce la inflamación y el dolor. tomar un baño con agua fría es un consejo efectivo utilizado por los atletas; sin embargo, también se puede optar el uso de bolsas de hielo en los músculos doloridos. Su función es estrechar suavemente los vasos sanguíneos para reducir el suministro de sangre y también adormecer el tejido, una vez retirado, los vasos sanguíneos se dilatan rápidamente para restablecer el suministro de sangre y de ese modo ayudan a eliminar el ácido láctico y los neurotransmisores del dolor.

Con Información de foodpyramid