Blog author

www.diegodimarco.com

Conductor de TV, Asesor de nutrición y Coach de estilo de vida

¿Mal aliento? Te diré qué lo ocasiona

¿Qué es la halitosis? ¿Cómo sé si tengo mal aliento? ¿Qué causa el mal aliento? ¿Cómo puedo prevenirlo? ¿Quién es el especialista al que debo acudir? ¿Que puedo utilizar para eliminar el mal aliento?

La halitosis o mal aliento, puede presentarse por dos razones; malos hábitos de salud dental y síntoma de otros problemas de salud. Ésta puede agravarse por los tipos de alimentos que consumimos y hábitos de vida poco saludables.

¿Cuándo ocurre el mal aliento?

A primera hora de la mañana, a la mayoría de las personas -si no es que todas- nos huele mal la boca. Puede suceder cuando tienes hambre, estás a dieta o depues de comer algo muy condimentado o de olor fuerte, como el ajo, la cebolla o pastrami .

¿Qué causa el mal aliento?

Existen muchos factores que ocasionan el mal aliento. Una de las principales causas es la disminución de saliva la cual tiene un efecto de limpieza que reduce o elimina la halitosis. Cuando ésta disminuye, las bacterias crecen, provocando el mal olor en la boca.

La halitosis por disminución de saliva es notable:

  • Por la mañana

El flujo de saliva practicamente se detiene mientras duermes y las bacterias crecen. Es por eso que te levantas con mal olor en la boca.

  • Cuando tienes hambre

A las personas que están a dieta o se saltan las comidas es común que les huela la boca. Masticar los alimentos aumenta la saliva y cuando no comes ésta disminuye originando la halitosis.

  • Si estás deshidratado

Al deshidratarte automáticamente dejas de producir tanta saliva y llega el mal aliento.

  • Enfermedades

Existen algunas enfermedades que afectan las glándulas salivales como el síndrome de Sjögren o esclerodermia.

  • Cuando tomas algunos medicamentos
  • Después de tomar bebidas alcohólicas

Estas pueden ser otras causas

  • Comer alimentos con olor fuerte.
  • Fumar.
  • Bacterias y acumulación de placa en la boca por alimentos atorados en los dientes, prótesis dentales o aparatos dentales.
  • Infecciones en la garganta.
  • Problemas dentales como la caries.
  • Enfermedad de las encias.
  • Amígdalas con túneles profundos.
  • Cáncer de boca o garganta.
  • Problemas con la nariz como pólipos nasales entre otros.
  • Diabetes.
  • Trastornos del sistema digestivo tales como reflujo, problemas intestinales o cáncer.
  • VIH o sida.
  • Enfermedad en el hígado.
  • Problemas en los pulmones ya sea por infección o cáncer.

Para el diagnóstico pueden  intervenir tanto médicos como odontólogos, y en algunos casos otros especialistas, quienes deben estar capacitados para realizar un diagnóstico confiable que posibilite desarrollar un tratamiento efectivo.

Es muy importante acudir con el dentista por lo menos dos veces al año y estar al pendiente de nuestra salud bucal.

 

 

 

 

 

 

 

Deja un comentario
Comparte en redes sociales:

Permanezcamos conectados

Sígueme en: